«La Flor de Tetuán», un reconocido restaurante de Santander, Cantabria especializado en Pescados y Mariscos salvajes. Cliente de toda la vida, quería modernizar y reemplazar los viveros viejos, pues iban a hacer reforma en el local y era necesario el cambio. Deseaba tener un vivero expositor que además de permitir reducir la mortandad del producto, significaba una nota decorativa que realzará el diseño del interior.
Solución: Se diseñaron unos viveros a medida y exprofeso para el sitio que había. Un vivero para Marisco de 1000L, donde instalamos dos filtros biológicos AguasVivas® con circuitos independientes y dos módulos principales con sus correspondientes bandejas para marisco pequeño.
Lo cual permitió un volumen de producto de 130Kg de marisco conviviendo en la misma instalación y agua natural de la mar expuesto al público, más una cetárea industrial de 6.000 litros que tienen en un almacén contiguo, con esta solución podían garantizar el almacenaje de grandes cantidades de mariscos en fechas clave, como navidades, verano, o semana santa.
Exponer el marisco vivo en cantidad y con aguas cristalinas es vital para vender cantidad y calidad.
De este modo, los clientes del restaurante pueden ver el producto desde todos los ángulos y tienen la oportunidad de hacer fotos o vídeos, pero sobre todo elegir ellos mismos el producto a consumir.
El resultado fue un incremento de la venta de producto del mar del 35% en los 3 meses siguientes, y sobre todo un decremento de la mortandad del 20%.